“La impotencia es una disfunción sexual masculina, que afecta mucho la autoestima y la seguridad sexual de un hombre, puede presentarse en ocasiones debido a un tema de ansiedad, estrés, cansancio, tabaquismo, consumo de alcohol o drogas, etcétera, o en forma más permanente en el tiempo, necesitando tratamiento”, explica la sicóloga Esther Morales.
Por ello, “si el hombre presenta una impotencia frecuente, es bueno que consulte un urólogo, que descarte problemas físicos. Si el problema es de causa sicológica o relativo a la relación de pareja, una terapia sicológica individual o de pareja puede ayudar a resolver el problema de fondo, evitando que el hombre quede condicionado, y que el temor a tener malas erecciones o no tenerlas, le produzca una angustia o miedo anticipatorio ante una nueva relación sexual”, dice la especialista.
¿De qué estamos hablando?
Según la enciclopedia médica Medline, la impotencia es “la incapacidad de lograr o mantener una erección del pene que sea lo suficientemente firme para que un hombre tenga una relación sexual. Es posible que el hombre no pueda lograr una erección en absoluto o que la pierda durante el coito antes de estar listo. Si la condición persiste, el término médico es disfunción eréctil”. Este problema es muy común entre los hombres adultos, e incluso se podría decir que todos alguna vez presentan algún tipo de dificultad en la erección. El tema es que en este caso es progresivo y afecta la autoestima y su vida íntima de sobremanera, por lo que requiere de tratamiento.
¿Cómo saber si se tiene ese problema?
“Si un hombre tiene dificultad para lograr o mantener una erección más del 25% de las veces, se considera un problema”, afirma Medline.
¿Qué hacer si tu pareja es impotente?
“En primer lugar es importante que la mujer pueda comprender las razones de la disfunción eréctil (impotencia), lo cual implica como mínimo un diálogo franco y abierto con su pareja y, quizás, la orientación del especialista en sexualidad. Entre las múltiples causas pueden estar incluidas enfermedades médicas y sicológicas, uso de determinados fármacos, temor al fracaso sexual, otros miedos, estimulación insuficiente o inadecuada, estrés, preocupaciones y una larga lista de etcéteras”, explica el sicólogo y sexólogo Ezequiel López. Y añade: “Al entender los motivos de las disfunción, la mujer evitará algunas interpretaciones típicas como "ya no te atraigo", "esto te pasa porque no me quieres" o "seguro que hay otra persona". Esos pensamientos generan angustia, enojo o resentimiento, y no hacen más que alejar a la mujer de su pareja y presionarlo directa o indirectamente, con lo cual aumentarán las exigencias por el rendimiento del varón, lo que resulta letal para el mecanismo de la erección”.
Otra manera de jugar
Para la sicóloga Esther Morales, la impotencia en la pareja requiere de un cambio de conducta y en la forma de ver el sexo de sus protagonistas. Para ello aconseja que “durante el contacto íntimo, es bueno continuar con el juego sexual, conversar, relajarse y la erección puede venir en forma natural después de un momento. Además, el hombre puede dar placer a su compañera con bonitas palabras, caricias, besos, sexo oral, etcétera, y llevarla a tener un orgasmo, sin necesidad de penetración. Es sabido que después del coito, el hombre tiene un período refractario, ya que la eyaculación implica un enorme desgaste energético, que lo hace quedar cansado. Es recomendable que si se presenta un problema erectivo, la mujer evite presionar o humillar al hombre, mostrando abiertamente su frustración o culpándolo por algo que no puede controlar voluntariamente”.
La importancia de la comunicación
“La comunicación verbal es esencial, entonces, para evitar las distorsiones en el modo de pensar la situación y, además, es una manera de canalizar los sentimientos de ambos y abordar una solución. La mujer nunca debe reprocharle la situación a su pareja; tampoco estar tan pendiente de la erección, como evidentemente está él, incluso puede cambiar el foco y buscar la erotización de otras zonas, como una manera de relajarse y excitarse por diferentes vías, sin centrar todo en el pene, y mucho menos debe comparar la performance con la de parejas anteriores. No creo que exista algo tan mortal para la autoestima masculina que pensar en que otros hombres satisfascían más en lo sexual a su pareja que él”, afirma el sexólogo Ezequiel López. Y en el mismo sentido agrega: “Es importante el diálogo para comprender y buscar soluciones; evitar comentarios o expresiones emotivas contraproducentes; crear recursos de placer no centrados en la penetración, y eventualmente, si el problema se hace recurrente, consultar a un sicólogo o médico experto en sexología”.
2 comentarios:
Lo principal para ayudar a la impotencia sexual es subir los niveles de testoterona para eso lo mejor es buscar los medicamentos mas naturales posible ejemplo testo ultra de las que recomiendo
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