lunes, diciembre 25, 2006

¿Qué es la eyaculación precoz? ¿Tiene solución?

La eyaculación precoz se refiere a la incapacidad del hombre de controlar el reflejo eyaculatorio, alcanzando el orgasmo demasiado pronto, lo que conlleva problemas psicológicos frente a la pareja.
Aunque suele afectar más a hombres sin experiencia, también puede sobrevenir por situaciones de estrés, ansiedad o falta de motivación. Las causas suelen ser psicológicas y no hay ninguna medicación que la cure. La forma de controlar el reflejo eyaculatorio pasa por el aprendizaje, lo que requiere la visita a un terapeuta sexual. Los ejercicios de Kegel, junto con el aprendizaje de técnicas de relajación, son actualmente la terapia más efectiva. Éstos comienzan con la práctica de la masturbación en solitario para, una vez controlado el reflejo eyaculatorio, pasar a la masturbación en pareja. El objetivo es identificar el punto de “inevitabilidad eyaculatoria” para saber parar justo antes. En ese momento hay que detenerse, relajarse y comenzar de nuevo cuando el nivel de excitación haya disminuido. El control de la eyaculación también está relacionado con la postura en la que se realice el coito; normalmente, el hombre tiene mayor control cuando está tumbado boca arriba.

miércoles, diciembre 06, 2006

¿Crisis sexuales?... ¡hablen!

Un estudio que consultó a más de 14 mil mujeres de 14 países de todo el mundo revela cuales son las necesidades de las mujeres en la cama y que están pidiéndole a los hombres para mejorar el desempeño sexual de la pareja.
El estudio “Females” presentado en el Congreso Anual de la Sociedad Europea de Medicina Sexual, celabrado en Austria, asegura que las mujeres prefieren, como compañeros sexuales, a hombres comunicativos y espontáneos que las hagan sentirse atractivas e incluyan picardía y coquetería a su relación íntima.
Las mujeres de hoy, llamadas “vitalsexuales” se muestran abiertas a la comunicación con su pareja para solventar problemas de satisfacción en la cama y en concreto, nueva de cada diez, considera vital el diálogo para tener una buena calidad de vida sexual.
Sin embargo, algo que advierte el estudio con preocupación es el creciente número de hombres en todo el mundo, hasta 152 millones con edades entre los 20 y 75 años, que tienen problemas de erección debido al estrés, a las presiones o a la ansiedad. Una situación que repercute en sus compañeras y afecta incluso, su autoestima.
A pesar de que el 85 por ciento de las personas considera que se trata de un problema bastante común y que puede ocurrirle a cualquiera, todavía existe un reticente 31 por ciento que lo ve como un problema exclusivo del varón y fuera de cualquier vínculo con la mujer. Los profesionales insisten en que «es un trastorno que atañe tanto a varones como mujeres. No hablar lleva a un distanciamiento importante», explica el profesor Siegfried Meryn, presidente de la Asociación Austríaca de Medicina Sexual.

viernes, noviembre 17, 2006

Potencia sexual y disfunción eréctil

Cuando abordamos el tema de la potencia sexual masculina, es inevitable asociar el término disfunción eréctil como sinónimo de la impotencia sexual, conocer la diferencia entre estos términos puede despejar muchas dudas.
Tanto en el tema de la disfunción eréctil como en el de potencia sexual masculina, se debe tomar en cuenta que hay una gran cantidad de factores que influyen sobre ellas. La disfunción eréctil es la incapacidad de lograr una erección satisfactoria para el desempeño de la relación sexual. La impotencia es un término más amplio que incluye en un porcentaje significativo a la disfunción eréctil. En la impotencia sexual se tiene problemas del sistema nervioso, problemas hormonales, problemas vasculares y problemas de la anatomía del miembro o del músculo liso y de su capacidad de incrementar o disminuir su tamaño. Los trastornos del sistema nervioso pueden ser centrales o periféricos aún al margen de los estímulos que desencadenan la excitación y su respuesta sexual, a parte de esto, según el Dr. Mario Guerra, de Laboratorios Vijosa, hay múltiples causas que afectan a esta etapa, entre ellas está la integridad de los nervios, el cansancio, la fatiga, el consumo de “drogas sociales” como el alcohol y el tabaco, además pueden influir los medicamentos de uso cotidiano, como antidepresivos y antihipertensivos, que pueden ser el origen de hasta un 25% de los casos de impotencia, no sólo de disfunción eréctil de origen vascular, también pueden afectar hernias de disco y cirugías pélvicas. “No todo paciente impotente va a tener disfunción eréctil vascular, pero todo paciente con disfunción eréctil de tipo vascular es impotente” dice.
En Estados Unidos, las estadísticas confirman que hay de 20 a 30 millones de hombres que sufren impotencia de origen vascular, pero hay otra cantidad más que la padecen por diferentes motivos y que son objeto de investigación para determinar las causas y poder mejorar sustancialmente la calidad de vida.
Padecer ciertas enfermedades predispone a tener impotencia sexual, incluyendo un daño a la microcirculación. La hipertensión arterial y la diabetes mellitus son algunas de las enfermedades que dañan la circulación sanguínea, principalmente a nivel de pequeños vasos sanguíneos. Por ejemplo, un 20% de los hombres que padecen Diabetes Mellitus pueden llegar a sufrir de impotencia sexual porque hay daños nerviosos de origen metabólico, disminución en la producción de hormonas y también daño en la microcirculación, por esa razón se tienen respuestas inapropiadas cuando un paciente está recibiendo un medicamento tradicional de las sales especializadas y por ello el paciente no responde satisfactoriamente en su mecanismo de erección. Enfermedades como la Dislipidemia (colesterol y triglicéridos altos) contribuyen a que un paciente presente alteraciones en su potencia sexual. Todas estas enfermedades tienen un efecto sumatorio, es decir un hombre diabético, hipertenso y con problemas de colesterol y triglicéridos tiene un alto riesgo de sufrir de impotencia sexual, además del efecto que pudiera causar el consumo de los medicamentos para tratar estas enfermedades. “Un 50% de los pacientes que tienen un déficit de hormonas (producción de testosterona o calidad de la hormona) también desarrollan impotencia” recalca el Dr. Guerra.
La edad es otro factor que aumenta la incidencia y el riesgo de sufrir impotencia, se conocen casos de hombres menores de 40 años que la padecen. Existen una variedad de presentaciones clínicas de impotencia que van desde una flacidez completa (que no responde a ningún tipo de estímulo), erección flácida y una erección satisfactoria, pero que no se logra mantener debido a las fallas que pueden ser neurogénicas, arteriogénica y veno-oclusiva. Hay una delgada línea entre impotencia sexual y disfunción eréctil. La impotencia sexual es un término más amplio y multifactorial, es decir, que puede tener como origen varias causas; en cambio la disfunción eréctil es aquella cuyo origen es un problema vascular. El tratamiento dependerá de las causas; el médico tendrá que evaluar integralmente al paciente para que éste obtenga los mejores resultados.
Es importante aclarar que no existe un tratamiento generalizado para todos los tipos de impotencia sexual o la disfunción eréctil. El médico debe hacer una evaluación para identificar el nivel de daño o fallo y abordarlo según sea el caso, que puede ser desde medicamentos que activan diferentes niveles de la impotencia sexual, ya sean estos orales y/o locales, hasta las bombas de vacío o prótesis peneanas.
Con frecuencia, muchos hombres consultan cuando ya la enfermedad está avanzada, revertir ese proceso o minimizar su impacto se vuelve más difícil, pero todavía hay esperanza ya que un alto porcentaje de hombres mejora cuando se someten a tratamiento para la impotencia sexual.

miércoles, noviembre 15, 2006

La medicina sexual moderna se encuentra con Sigmund Freud en la capital de su herencia

El 9 Congreso de la Sociedad Europea de Medicina Sexual (ESSM) se celebrará del 3 al 6 de diciembre de 2006 en el Centro de Congresos de Hofburg en Viena. Prestigiosos expertos europeos comentarán los últimos desarrollos científicos en sexualidad humana y sus funciones. Los temas estudiados incluyen: la ciencia de la respuesta sexual de la mujer; la relación entre función sexual, satisfacción y calidad de vida; nuevos desarrollos en la dirección médica y quirúrgica de disfunción eréctil (ED); eyaculación precoz; el rol de las hormonas. Un aspecto vital del congreso es la oportunidad que proporciona para una colaboración interdisciplinar. También: el estudio de la salud sexual de las mujeres sigue creciendo en prominencia. Casi todos los cuidados médicos pueden tener un impacto en la sexualidad. Incluso hoy en día, la sexualidad sigue siendo un tema tabú en las consultas médicas; muchos médicos rara vez, si acaso, preguntan a sus pacientes acerca de ello. Aunque la disfunción sexual puede aparecer en numerosos campos de la medicina como síntoma de otra enfermedad, o el efecto secundario de un tratamiento que se tiene que tomar en serio.
Por ejemplo, los diabetólogos deben ser conscientes que hasta el 50% de los diabéticos padecen de desórdenes sexuales; los reumatólogos pueden interesarse por la disfunción sexual puesto que la administración de analgésicos puede reducir el estímulo sexual; psiquiatras deben prestar atención al ED como un signo temprano de depresión y que los problemas con deseo de erección y orgasmo son efectos secundarios comunes de una medicación antidepresiva. La sexualidad de las mujeres tiene sus propias normas. Hasta el 2004, los congresos sobre medicina sexual trataban principalmente con el ED. Ahora debemos aceptar el hecho que, para disfrutar de una vida sexual satisfactoria, la mujer necesita algo más que una pareja que esté sana. La disfunción sexual siempre involucra a dos personas. La ciencia cada vez más reconoce que la persona que está más afectada de forma obvia por un desorden sexual, el paciente, no lo padece solo. Los estudios están empezando a centrarse más en la pareja como una entidad y en el impacto que la disfunción sexual del hombre o la mujer posee sobre ellos mismos. El funcionamiento no garantiza el bienestar. 'La calidad de vida' es otro tema importante que no ha recibido suficiente atención en el pasado. A pesar del tratamiento con éxito, el bienestar no está garantizado -ni para el individuo ni para la pareja-.
Otros temas del 9 Congreso ESSM:
--Administración en demanda de inhibidores PDE5 como la Viagra(R), Levitra(R) o Cialis(R) solo para el propósito de inducir una erección podrían estar desfasados muy pronto. Los estudios más recientes sugieren que la dosificación crónica puede tener efectos beneficiosos en la salud cardiovascular.
--La evidencia señala el camino de que puede haber un enlace entre la disminución de producción de hormonas sexuales, como testosterona, y el desarrollo de síndromes metabólicos en hombres envejeciendo.
--Parejas envejeciendo: A lo largo de cambios demográficos, la medicina sexual se enfrenta a una necesidad creciente para proporcionar cuidados apropiados para las necesidades especiales de las personas mayores.
--La eyaculación precoz afecta hasta el 40% de hombres, por lo tanto siendo más común que la disfunción eréctil. Una gama de opciones de tratamientos farmacológicos y no farmacológicos están disponibles actualmente.
Acerca de ESSM
La Sociedad Europea para la Medicina Sexual se fundo en 1995 con el fin de promocionar progresos científicos, formación y cooperación entre profesionales en el campo de la medicina sexual. 13 sociedades nacionales con un total de 1.400 miembros están afiliados a la ESSM. El encuentro anual del ESSM de este año se celebrará en Viena, la ciudad de Sigmund Freud, que fue el primero en describir los efectos de las fuerzas sexuales en las capas del consciente.

martes, noviembre 14, 2006

El “cibersexo” genera aislamiento

La web genera nuevas prácticas sexuales, ante las cuales los especialistas en tratar problemas de la sexualidad tienen posiciones tomadas. Tal vez haya pasado muy poco tiempo como para establecer ciertamente qué es lo normal o qué no lo es; no existe aún una investigación del cibersexo, aunque por lo pronto ya se pueden vislumbrar algunas problemáticas.
Dado su crecimiento -se estima que millones y millones de personas buscan pareja, real o virtual, a través de Internet-, el cibersexo debe ser entendido como una nueva forma de sexualidad basada, fundamentalmente, en que los estímulos principales son virtuales. Siendo así, la visión de la relación sexual como una actividad de carácter íntimo y privado entre dos personas, en la que se comparten las emociones, el placer, la comprensión, y se fortalecen vínculos de apreciación y respeto, queda puesta en duda como prototipo de la normalidad.
Uno de los grandes atractivos de esta forma de sexualidad es la posibilidad de entregarse a sus mieles sin tener que preocuparse por la prevención de enfermedades, la eventualidad de un embarazo no deseado, la posibilidad del rechazo y otras complicaciones que conllevan las relaciones carnales reales.
De lo que los “cibernautas” no pueden escapar, al parecer, es de la necesidad de evitar la adicción a la red y el aislamiento que es capaz de provocar el mundo virtual. “La compulsión por el uso de Internet puede tener consecuencias tanto o más graves que la adicción a las drogas, al alcohol o el juego –señala Beatriz Literat, del departamento de Disfunciones Sexuales del instituto médico Hálitus–.
Una persona adicta dedica gran parte de sus horas diarias a la búsqueda y al cumplimiento de sus fantasías sexuales. Esta adicción puede generar comportamientos fuera de lo normal, como aislamiento y pérdida progresiva de la capacidad de relacionarse cara a cara”. La terapeuta opina: “si bien la computadora ofrece una alternativa sexual más, el cibersexo contribuye a banalizar la sexualidad y a quitarle sus rasgos más humanos y ennoblecedores”. El erotismo, señala, requiere de los sentidos -vista, oído, olfato, tacto y gusto- para estimularse. Y en los encuentros virtuales, sólo se ven palabras escritas, excepto cuando se utiliza la cámara de video. La especialista cree necesario advertir que si se llegara a reemplazar la sexualidad real por la virtual, y si una persona hallara en estas prácticas mayor satisfacción que en los encuentros de persona a persona, se estaría ante una sexualidad limitada.
Los puntos a revisar, según enumera la profesional consultada, son: posible personalidad adictiva, posible baja autoestima y necesidad de apego compulsivo a situaciones o elementos que le confirmen a la persona su valía.
La especialista ha tenido consultas de personas tímidas o con fobia social, que tenían miedo del rechazo y recurrían al cibersexo; pero también, “consultas de personas que no estaban conformes con sus parejas y se desquitaban con el chateo, una suerte de infidelidad virtual”, que podía derivar en una relación extraconyugal real, o no.

sábado, noviembre 11, 2006

¿Quién teme a la eyaculación precoz?

A fecha de hoy, retrasar el momento de la eyaculación constituye una de las preocupaciones masculinas más extendidas. De hecho, entre los varones, la eyaculación precoz y la disfunción eréctil son los problemas sexuales que con más frecuencia nos consultan a los sexólogos.
La clave fundamental del problema es la propia concepción que se tiene de precocidad y la preocupación muestra las mismas características en relaciones hetero u homosexuales. Lo inmediato, y en apariencia sencillo, es cuantificar el tiempo que transcurre desde la penetración hasta la eyaculación. Descartados los claros casos de eyaculación tan precoz que el coito -sea vaginal o anal- se hace imposible, la preocupación surge cuando eyaculando durante la penetración, se hacen reproches sobre su excesiva rapidez o ausencia de control asumiendo que por ello la pareja no llega a disfrutar lo que podría.
Cronómetro en mano, recientemente se han realizado algunos estudios por una industria farmacéutica, que considera la posibilidad de lanzar un fármaco que permita retardar el momento de la eyaculación. En otra ocasión reflexionaremos sobre él y sobre otros tipos de intervención para abordar los problemas de precocidad eyaculatoria. Así, en el último año se han difundido datos tales como que el hombre que se considera normal tarda en eyacular 7,3 minutos, en tanto que los autocalificados como precoces eyaculan en 1,8 minutos de coito.
Aprender y ejercitar el control voluntario 'razonable' del momento en que se eyaculará, más que el cronómetro, es fundamental para resolver este problema. Puesto que la eyaculación -y el orgasmo, usualmente asociado- es una respuesta vegetativa, la capacidad de 'control voluntario' está muy matizada tanto por factores personales, que van desde el rasgo de carácter (cuanto más ansioso, más rápidas todo tipo de respuestas, también las sexuales) hasta los múltiples aspectos dependientes de la situación concreta: pareja, contexto, experiencia propia -de la pareja y de ambos-, estado físico, motivación, estado de animo, conflictos, etc.
Es cierto que el control es importante, pero entendido de forma razonable, ya que la exagerada preocupación por controlar la emisión de esperma, además de interferir en el placer, puede tener el efecto contrario y por el nerviosismo, hacer que se eyacule antes.
La clave está en mantener un control razonable vinculado a la auténtica necesidad que se experimenta. Para esto lo mejor es una cierta actitud de autoescucha positiva -no autoobservación crítica-, ser condescendiente y tener confianza y complicidad con la pareja. Y para los más jóvenes, ¡animo todo se aprende! Aprovechad que tenéis más facilidad para repetir.
¿Te has encontrado dudando sobre tu precocidad en alguna ocasión? ¿Has tenido la impresión de que tu pareja era precoz? ¿Habéis hablado sobre ello? ¿Cuál ha sido tu momento más rápido?

domingo, octubre 29, 2006

La masturbación

Ésta es la actividad primaria en la vida sexual de todos los seres humanos, es la base de la vida sexual, cualquier cosa que hagamos después será una manera de socializar con ella. Lamentablemente, esta actividad sexual en solitario ha estado rodeada de muchas prohibiciones y malos entendidos. Se nos ha educado para manejar este tema como un tabú, y con miedo a la posibilidad de descubrirla y experimentarla. Afortunadamente, hoy contamos con espacios como este blog para informar, además de la existencia de literatura erótica, películas y demás que ayudan a que tanto hombres como mujeres conozcan y practiquen esta conducta como una alternativa normal de todos los seres humanos (además de los miembros del reino animal).
La masturbación es una actividad autoplacentera que requiere primordialmente de la estimulación física directa a los genitales, senos, parte interna de los muslos y el ano; y no requiere necesariamente de alcanzar un orgasmo. Aún cuando la autoestimulación puede ser parte de la relación sexual de pareja, en este artículo nos referiremos a la actividad privada y en solitario.
Se inicia durante la infancia y es muy común entre hombres y mujeres durante el ciclo de vida, y, como mencioné anteriormente, también se manifiesta entre los animales. Pero a pesar de que parece una actividad normal ha sido considerada como indeseable y está rodeada de actitudes tan negativas como llevar a quien la practique a perder la visión ("¡te vas a quedar ciego si sigues haciendo eso!"), locura, pérdida de peso, acné, debilidad, letargo y hasta la muerte. Suena jocoso pero se han realizado tantas actividades a través de la historia para ponerle fin a esta actividad: correas, candados, cirugías con tal de que nadie se atreviera a "tocarse aquello". Se llegó a pensar que dejar de ingerir ciertas comidas podía reducir el riesgo de que alguien se escondiera para masturbarse, estas comidas restringidas eran las ostras, la sal, la pimienta, el pescado, la gelatina, el chocolate, el jengibre y el café. No sé ustedes, pero conozco a más de dos que donde le hubieran quitado el café y el chocolate de la dieta hubieran hecho cualquier cosa por cuestionar semejante medida restrictiva. Hasta se llegó a pensar que estas “comidas pecaminosas” para los masturbadores, excitaban sus nervios y aumentaban el deseo sexual (¿afrodisíacos quizás?). Las medidas para eliminar esta conducta sexual fueron tantas y tan variadas que llegaron incluso a la castración del clítoris o a la circuncisión por motivos no religiosos con tal de que la limpieza del pene requiriera de menos manipulación. No fue sino a principios del siglo XX que se llegó a la conclusión de que nadie enloquecía por masturbarse y algún valiente médico sugirió que las mujeres se masturbaban para disminuir la histeria y que era mejor que los hombres lo hicieran con tal de no buscar prostitutas y contraer alguna enfermedad de transmisión sexual. Aún así se le creía responsable de crear en quien la practicaba dolores de cabeza, senilidad prematura, pérdida de la memoria, apatía e irritabilidad y por supuesto ceguera. A mediados del siglo pasado todavía se hablaba de aparición de vellos en la palma de la mano, deformidad en los genitales, esterilidad, disfunción sexual y ceguera como resultado de la práctica autoerótica. Quizás usted se ría de estas antiguas creencias pero todavía hay gente que las cree y quienes se masturban experimentan culpa por motivos religiosos o morales. La mayoría de los adolescentes aún están preocupados por el tema y por su consecuente estado de salud basado en todas las creencias que anotamos a continuación y que hoy día se saben que no son ciertas:
· La masturbación es un pecado
Esta observación está basada en las creencias morales y religiosas de cada quien. Entre más fuerte sean sus creencias morales y religiosas, menor será la práctica masturbatoria.
· La masturbación no es natural. Completamente falso. Si se observa en el reino animal, en bebés e infantes es una conducta natural.
· La masturbación es parte de crecer, los adultos maduros no la practican. La masturbación es una actividad que se presenta a lo largo de la vida. Algunos expertos consideran que es una conducta inmadura sólo y cuando sea la única práctica sexual y se practique de manera compulsiva a pesar de que puedan utilizar otras prácticas sexuales.
· La masturbación produce hábito y afecta el funcionamiento sexual. El no experimentar la masturbación puede llevar a problemas psicosexuales tales como impotencia y anorgasmia. Aprender sobre la masturbación es una herramienta en muchos programas de terapia sexual. Adicionalmente hoy están muy claras las ventajas de esta: provee de un escape sexual a quienes no tienen pareja incluyendo a los adultos mayores, ayuda a aquel miembro de la pareja que tiene un deseo sexual más elevado que el de su pareja en un momento dado. Para concluir, es una manera gratificante de aliviar la tensión y relajarse.

miércoles, octubre 25, 2006

Lanzan pastilla masticable para la impotencia

Un laboratorio argentino ha presentado un masticable con sabor a frutilla contra la disfunción eréctil. En ese país se consumen unos dos millones de comprimidos del sildenafil, la droga madre.
El laboratorio argentino Finadiet anuncia el lanzamiento de este primer comprimido masticable de sildenafil con sabor a frutilla para el tratamiento por vía oral de la disfunción sexual eréctil. La ventaja para el consumidor es que con este comprimido no se precisa agua para su ingesta, sino que simplemente se lo mastica como un caramelo. Además, no se debe emplear con demasiada antelación al acto sexual porque su efecto es eficazmente rápido. Estos originales comprimidos masticables tienen 50 mg de sildenafil, que es la dosificación por vez que más se consume, y permiten tener una mayor discreción, algo que al hombre le interesa en determinadas circunstancias. En la Argentina se consumen unos dos millones de comprimidos sildenafil por mes, de los cuales medio millón son en forma de masticables. A pesar de que el sildenafil debe estar indicado por prescripción médica, en la actualidad su uso se ha incrementado significativamente a expensas del consumo que hacen los jóvenes, que buscan estar sexualmente activos en forma permanente. La eficacia y seguridad del sildenafil se ha reconfirmado con certezas, y los pacientes con problemas coronarios o aquellos que por alguna causa ingieran medicamentos con base de nitratos y nitritos no deben consumir sildenafil.

domingo, octubre 22, 2006

Eyaculación precoz

Viñeta clínica: “La pasamos súper. Regresábamos a casa, ella me veía tiernamente. Esta vez todo saldría bien, me repetía una y otra vez. En la cama, me acariciaba. Comencé a sentir angustia, no sabía si detenerla, o qué. No recuerdo bien, quise apurarme a penetrarla. Lo que sucedió luego es confuso. Al ver sus ojos, me figuré que pasó otra vez. Eyaculé, todo acabó. Ella suspiró y se dio la vuelta. Las palabras sobraron.”
La eyaculación precoz es la disfunción sexual masculina más frecuente; cerca de 35% de los hombres la ha presentado.
Es la incapacidad para modular el grado de excitación erótica apropiadamente y se eyacula, cuando uno no quiere, inmediatamente antes, durante o poco después de penetrar a la pareja.
Hay que considerar factores, como la intensidad de la excitación, la edad, la frecuencia de la actividad sexual y la aparición de situaciones nuevas o desconocidas.
La persona que padece de eyaculación precoz no disfruta su orgasmo. Sucede cuando no quiere y sobreviene con ansiedad, inseguridad, disgusto y confusión —en cierta forma, se da una “anestesia erótica”—, que anulan el placer de la experiencia. Así, él se siente disminuido, desubicado, humillado. Su pareja queda insatisfecha, decepcionada o descontenta y, si estaba excitada, con una sensación incómoda y dolorosa en el vientre.
Algunas parejas optan por evadir el sexo, o su deseo sexual disminuye. La pareja que sufre este problema puede expresar su descontento fuera de cama, con actitudes de desapego, desinterés, confrontación, enojo o tristeza. No se descarta infidelidad de parte de cualquiera. Ella puede interpretarlo como un rechazo, desamor, incomprensión o falta de compromiso. Él puede pensar que es por ella y buscar convencerse.
Entre muchas causas, la eyaculación precoz se asocia a la manifestación de ansiedad durante el sexo. La ansiedad se delata ante sentimientos encontrados u hostiles hacia ella, fantasías reprimidas, angustia por cómo le va a ir durante el coito, incapacidad para percibirse y valorar el grado de excitación de uno o del otro, imposibilidad para decirse lo que les gusta y cómo ofrendárselo, ignorancia y prejuicios, conductas de sabotaje, culpa, etcétera.
Hay una gran contribución por mal aprendizaje. Ya que la vida sexual de muchos hombres comienza en el asiento de atrás de un coche, apurado por una sexo-servidora, a escondidas de los padres de la novia, forzado por sus amigos. No existe la noción del disfrute, sino que de “terminar y largarse”. Una vez en condiciones apropiadas, el estilo aprendido sigue. Es raro que una enfermedad sea responsable cuando él ha cursado con este problema por larga evolución.
Sospechar enfermedades prostáticas, neurológicas o degenerativas se debe si él era funcional y la EP se presenta súbitamente. Además, las enfermedades pueden acusar incontinencia, goteo o dolor al orinar. Una valoración médica aclara las dudas. Algunos hombres, ante lo impactante de la escena, presentan problemas de disfunción eréctil. El primer paso a la solución es la “conciencia de enfermedad”. Algunos le apuestan a una nueva erección. Otros “terminan la labor de la pareja” con sus dedos. Escuché a un hombre que dijo que en su vida no era tan problemático, pues aunque ella se queda con el malestar, “es bien comprensiva”.
Lograr un control adecuado requiere de técnicas donde se van tratando integralmente las situaciones de pareja, la identificación y resolución de conflictos; el conocimiento, la valoración y la administración de la excitación de ambos. La meta es hacer del placer erótico una experiencia gratificante y unificadora.

jueves, octubre 19, 2006

La impostergable menopausia

La fertilidad femenina llega a su fin una vez los años empiezan a aumentar. Desde los 30 años la capacidad femenina de reproducción declina y se refleja tanto un descenso en la fertilidad como un aumento de abortos espontáneos. Aunado a lo anterior se inician ciclos menstruales irregulares, hacia los 35 años las hormonas que provienen de la pituitaria disminuyen, hacia los 40 años la ovulación disminuye y entre los 48 y los 52 años ocurre la menopausia o sea la desaparición natural de la menstruación. Aunque realmente se debería usar el término una vez que haya transcurrido un año sin el período. A pesar de esta condición cualquier mujer que sea sexualmente activa debe practicar alguna medida de control de natalidad porque puede quedar embarazada durante este año. De lo anterior deseamos hacer énfasis en que el tiempo de ocurrencia de este proceso normal y natural variará de una mujer a otra.
SÍNTOMAS
Un 80% de las mujeres experimenta los síntomas debido a los cambios hormonales, sin embargo, sólo un pequeño grupo de éstas busca ayuda, ya que muchos de los síntomas desaparecen con el tiempo. El síntoma más común es la ráfaga de calor acompañada de sudoración y enrojecimiento en la parte alta del cuerpo. Algunas mujeres llegan a sentirse mareadas. Otras experimentan estos calores desde tan frecuentemente como cada hora hasta experimentarlo una vez por semana con una duración de segundos o hasta 15 minutos en casos muy severos. Lo más incómodo de esta situación es que se da durante el sueño, lo cual despierta inevitable y abruptamente y contribuye con el insomnio.Aparentemente este desequilibrio en la temperatura corporal se debe a causas fisiológicas controladas en el hipotálamo. Ciertas mujeres recurren a terapias de reemplazo hormonal para controlar esta situación que en la mayoría de los casos desaparece por sí sola. Es cuestión personal buscar ayuda debido a que es tan subjetivo reconocer que afecta más o menos a cada mujer. Otros cambios producto de la disminución de estrógenos es la falta de elasticidad vaginal y disminución en la lubricación del área, lo cual puede causar incomodidad al tener relaciones sexuales con la pareja. Otros cambios físicos que se dan durante el período posmenopáusico incluyen el adelgazamiento de los senos y la vulva y, la pérdida de minerales en los huesos que puede resultar en osteoporosis. De allí lo importante de consultar al médico para prevenir esta condición a tiempo y tomar la decisión en conjunto si se requiere el uso de medicamentos como el reemplazo hormonal u otros.
ASPECTOS PSICOLÓGICOS
Anteriormente se le achacaba a la menopausia cualquier problema de irritabilidad que la mujer presentara. Todavía hoy día se le responsabiliza de la inestabilidad emocional, depresión y otros problemas psicológicos asociados a los cambios hormonales durante los años menopáusicos. Se ha encontrado que los "síntomas emocionales" que se dan durante este período de la vida se ven influidos por una multitud de factores ambientales y de personalidad, además de estar cargados de una interpretación sexista por parte de algunos médicos varones. Se cree incluso que muchos de estos cambios que se observan a nivel emocional y psicológico responden más que nada al patrón de vida que la mujer ha llevado previo a su menopausia y que la depresión que puede darse no es más que el resultado de factores que tienen que ver con una falta personal de un rol significativo en su medio y a una baja autoestima más que a cambios hormonales. Los estudios en cuanto a la frecuencia de la actividad sexual han estado sesgados, ya que algunos reportan un declinar en la actividad sexual entre los 38 y los 54 años, mientras que otros señalan que muchas mujeres presentan un aumento en su sexualidad y en alcanzar más orgasmos.

miércoles, octubre 18, 2006

El deporte disminuye el riesgo de impotencia sexual

La actividad física que consume al menos 200 calorías diarias -equivalente a caminar a paso rápido tres kilómetros- puede reducir el riesgo de padecer impotencia en los varones, de acuerdo con un trabajo realizado por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston (Estados Unidos).
El estudio, publicado en el número de agosto de la revista Urology, es el primero de su tipo que demuestra que los varones que hacen ejercicio, incluso si comienzan a hacerlo a mediana edad, tienen un riesgo menor de padecer impotencia que los sedentarios. Al inicio del estudio, los investigadores analizaron datos de casi 600 varones que habían declarado no sufrir disfunción eréctil. Se centraron en factores de riesgo como el consumo de tabaco y alcohol, la obesidad y la práctica de ejercicio. Ocho años más tarde, estudiaron si los 600 hombres habían cambiado sus hábitos de conducta y si esos hábitos afectaban al riesgo de impotencia. El estudio concluía que el dejar de fumar en la mediana edad no reducía significativamente la disfunción eréctil. Además, los que tenían un exceso de peso tenían un índice de riesgo superior de padecer impotencia, independientemente de que perdiesen o no peso. Sin embargo, el riesgo más bajo correspondía a los hombres que se mantenían activos o incluso comenzaban su actividad física en la mediana edad. Es más, se detectó una relación dosis-respuesta entre la probabilidad de padecer disfunción eréctil y el nivel de actividad física.